Es el primero en aparecer por la puerta de la catedral. La figura es bella muy bien lograda, de faz perfecta, representa a un personaje de más o menos cuarenta años de edad, de amplia frente, espesa barba crespa, tras la cabeza lleva una bella aureola plana de plata repujada. En el hábito, a la altura del pectoral aparece bordado en oro un cerdo, cerca a la cintura unas rosas, y más abajo las bordaduras de un escudo; lleva capa igualmente bordada en oro y plata; en la mano izquierda sostiene un libro, con la derecha porta un báculo.
Sus andas son modestas, los cargadores son muchachos casaderos, pues el santo es patrón de los solteros, que da novio o novia. Según el caso al que lo solicita. En las andas, a un costado va un cerdito; el santo es patrón de los porqueros (en quechua de los ejuchineros). También en quechua le llaman qollana porque encabeza la procesión saliendo en primer lugar. Es originario de la Iglesia de San Cristóbal, desde donde baja al corpus christi junto con San Cristóbal.